sábado, 17 de noviembre de 2007

UNA IMAGEN

A veces ni siquiera te has ido, pero yo ya te extraño. Quisiera que te quedaras siempre y que tus noches se confundieran en mi almohada. Así sería feliz, sabiendo que ya no sería mi cama, sino nuestra cama.

Tengo bronca que ahora no estás y que ya te has ido, pero también tengo un sueño que me da consuelo y alivio.
Un sueño recurrente y una hermosa imágen que apacigua mi alma:

Encontrarme un día con tus zapatos estacionados para siempre debajo de mi cama.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

carajo que rico lo que escribiste que hermoso. Siempre dices cosas tan lindas tan honestas cuando escribes no tratas de impresionar pero si de transmitir y lo haces muy bien. besos para ti lindo.

Dalia dijo...

Que lindas palabras en verdad.